
Siempre es apto, antes de adquirir una propiedad, que tengan en regla todos los documentos de la casa. Una manera eficiente de hacerlo es solicitar los datos catastrales de la propiedad y dirigirte al Registro Público de la Propiedad para que te proporcionen un estatus, así sabrás si es verdaderamente el dueño quien está vendiendo la casa, si se encuentra bajo una sociedad conyugal, está embargada o libre de hipoteca.
Haz el trato directo
Debes cerciorarte de que la propiedad está en condiciones óptimas para ser vendido. Si todo está en orden, puedes continuar con la compra y dirigirte con un notario para que comience el trámite de la escrituración. Recuerda pedirle una copia de título de propiedad al dueño anterior, así como el certificado de libertad de gravamen, constancias de no adeudo de los servicios y en caso de existir, también constancia de no adeuda con la administración.
Si la propiedad tiene crédito hipotecario
En una situación así, el notario te solicitará presentar el título de propiedad, identificación del propietario, un certificado de libertad de gravamen y las contancias de no adeudo de los servicios y / o mantenimiento. Por otor lado, se investigará y verificará tu solvencia y buró de crédito, así como el avalúo comercial de la propiedad. Cuando hayas cumplido con todas estas características se puede continuar con los trámites de escrituración.
Ten presente que lo que hace el notario es indagar que la propiedad puede ser vendido de manera legal. De confirmarse la información, comienza un proceso que genera algunos gastos de operación.
– Impuestos: Hay de dos tipos, el Impuesto sobre la Renta (ISR) que va para el vendedor, el de Adquisición que va para el comprador. El notario tiene la función de hacer los pagos de tus impuestos a las dependencias correspondientes.
– Honorarios y gastos notariales: Ya va incluido el gasto de trámites y honorarios del notario. Estos deben ser pagados cuando se firma el contrato de compraventa y la cantidad va del 6% al 10% del valor del inmueble.
– Firma y entrega de escrituras: Cuando se firmen las escrituras, y se hayan pagado y entregado las llaves, el notario debe entregar una copia de la escritura y el contrato de compraventa, junto con el número de escritura para que puedas consultar el estado de la propiedad. Seguido de esto va el registro a tu nombre en el Registro Público de la Propiedad.
Con este proceso concluido tendrás tu nuevo hogar para ti y tu familia.